2.1.2 Los capilares de las nefronas
La arteria renal conduce la sangre desde la aorta al riñón y se ramifica en un gran número de arteriolas cuando llega al riñón. Estas llevan sangre hasta el glomérulo. La sangre que no es filtrada en el glomérulo, sino que sale por los capilares, es conducida por la arteriola eferente. La mayor parte de los fluidos y sustancias transmitidas a las nefronas en los glomérulos, son devueltos al torrente sanguíneo a través de estos capilares.